Su partida se produjo el pasado 24 de diciembre, justamente el mismo día de su cumpleaños, como si en este último instante, quisiera dejar un mensaje, cerrando con exactitud el tiempo que Dios había dispuesto para que, una buena persona como él, permaneciera entre nosotros generando continuamente en su vida hechos en bienestar de sus compañeros y de toda la comunidad.
El comisario José Jesús Amorós fue de esos hombres y mujeres que se entregan con pasión por la tarea que desarrollan en el transcurso de su vida, despojándose de intereses personales, sin egoísmos, ni soberbia y actuando con humildad, sin abandonar la lucha ante los obstáculos que se le cruzan a quienes, han trabajado y dedicado su vida con el objetivo de mejorar la realidad de sus semejantes.
Por todo eso y más, es que su alma y espíritu quedara entre sus compañeros que vieron como hizo crecer el Círculo Policial que con toda justicia lleva su nombre, y también estará presente en toda la sociedad rojense.
Sus familiares y amigos, más allá de la tristeza por su partida, seguramente desde este mismo momento, comenzarán a sentir la inexplicable satisfacción de saber que su presencia estará en cada oportunidad que la necesiten para recordarles los valores de honestidad, humildad, sacrificio y lealtad para conseguir lo que se proponen.
Los rojenses le decimos un enorme gracias y hasta luego.