La furia del clima

La tormenta del viernes causó importantes destrozos en Pergamino

Cuantiosos daños materiales.
Cuantiosos daños materiales.

Afortunadamente no hubo vecinos lesionados de gravedad, como consecuencia de este temporal, sólo algunos golpes y la angustia que debieron sufrir.

La mayor furia de este cuasi tornado, se desató minutos después de las 20:30.

El fenómeno meteorológico incluyó una intensa lluvia y fuertes ráfagas de viento que causaron la caída de árboles en varios sectores de la ciudad. Cortes de cables, la voladura de techos y carteles fueron otras secuelas del episodio.

El servicio eléctrico estuvo cortado en gran parte del casco urbano (la caída de árboles generó inconvenientes en líneas de media tensión de la Cooperativa Eléctrica).

El accidente más significativo, fue el sufrido por el conductor de un automóvil; Chevrolet Corsa gris quien quedó inconsciente al caer un árbol sobre el auto que manejaba en inmediaciones de avenida Jauretche y Garay.

Según los testimonios de testigos ocasionales, el chofer luego, salió por sus propios medios del auto, solicitando auxilio a los vecinos de una casa frente al lugar del siniestro, quienes  llamaron al servicio de emergencias 911.

Una ambulancia del SAME acudió al lugar a prestarle asistencia médica de urgencia y trasladarlo al Hospital Interzonal General de Agudos “San José”.

Las calles de la zona céntrica y de los barrios fueron escenario de innumerables caídas de ramas y plantas sobre las veredas y la cinta asfáltica dificultando e impidiendo, en algunos casos. la circulación vehicular.

La Municipalidad activó el plan de contingencia de Defensa Civil ofreciendo el servicio de emergencia vecinal 147 para que reporten las situaciones de riesgos por ramas o árboles caídos en las distintas zonas de la ciudad.

Las distintas cuadrillas de agentes municipales del Corralón de servicios públicos y de la Cooperativa Eléctrica iniciaron un operativo de limpieza y de mantenimiento porque se reportaron, también, cables caídos en distintos sectores.

Caos, destrozos de bienes materiales, pero sin ningún vecino lesionado que lamentar.

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