“Esto ya es demasiado”, dijo una mujer a través de las redes sociales, donde denunció que le robaron el parabrisas del auto que estaba en la puerta de su casa. Y describió, con mucha bronca e impotencia “escuché que se han robado de todo pero encontrarte que te robaron el parabrisas esto ya no lo entiendo”.

Y agregó los tipos se tomaron el laburo hasta de cortar prolijamente los burletes y llevárselo”. Este hecho delictivo es similar a lo sucedido en otras ocasiones y se debe a la falta de prevención de parte de las autoridades municipales. “Rojas ya es tierra de nadie. Ojalá le sirva al chorro hdp”, expresó la víctima.

Esto sucede mientras se espera la presentación en breve del plan de Seguridad, de parte del secretario de Seguridad del Municipio, el inefable abogado penalista Miguel Núñez. Y añadió un comentario diciendo “no me gasto en hacer la denuncia. Lo mismo me pregunté pero bueno ya es tierra de nadie”.

Otra mujer indicó que “a mi papá le robaron las 2 patentes y uno de los limpia parabrisas”, describiendo igual modus operandi por parte de los vándalos y la gente da cuenta de que la ola delictiva no se detiene, porque nadie los detiene a los delincuentes.

“A nosotros nos abrieron el auto y nos robaron, al auto de adelante le llevaron la batería”, en calle Vélez Sarsfield. “Lo vimos pasar corriendo por al lado nuestro cuando robó, la gente salió a correrlo, pero se metió en un terreno y desapareció. Mucha impotencia, nadie hace nada”, relata otra persona en las redes sociales.

“La denuncia es de gusto”, dice la mujer y expresa “la gente en Rojas hace catarsis en face, que no está mal escracharlos, pero si a todos los que nos robaran fuéramos a la Municipalidad a reclamar por nuestra seguridad, la cosa sería otra”. “Lamento mucho lo que pasó, yo lo viví en mi casa y a las 9 de la mañana, es una impotencia tremenda”

Otra persona comenta que “al auto de mi hermano, es un Duna, le hicieron exactamente lo mismo, afuera de la casa. Esto ya es por demás un desastre”. Todos comentarios y opiniones con impotencia, esperando que las autoridades tomen cartas en el asunto alguna vez.