Lo que era un domingo de sana diversión paseando por el centro de la ciudad de un grupo de niñas que transitan la pre-adolescencia, se convirtió de pronto en un suceso que muy probablemente no olvidarán en el resto de su vida.

Según relataron a sus padres, se encontraban en un comercio de comidas, alrededor de las 21.30 de este domingo 6 de agosto y, en un momento determinado dos jóvenes de poco más de veinte años de edad se les acercaron intentando caerles en gracia, ofreciéndoles pagar lo que consumieran en ese local.

El negocio en el que ellas estaban consumiendo, se ubica en calle Iribarne a pocos metros de la Avenida 25 de Mayo.

Ante esto, las jovencitas se comunicaron inmediatamente con sus progenitores, quienes no dudaron un  instante en realizar la denuncia policial, que derivó en la detención de estos dos individuos que al llegar la medianoche aún se encontraban demorados en la Comisaría local, intentando aclarar lo sucedido.

Los padres de este grupo de niñas se concentraron fuera de la sede policial, aguardando novedades al respecto.

Más allá de que aún no es posible determinar la calificación jurídica del hecho denunciado, lo sucedido debe ser de utilidad para toda la comunidad y,  motivo de reuniones entre autoridades de todos los niveles, desde lo político, judicial y educativo, junto a los propios jóvenes, que generen conciencia sobre la existencia de estos hechos, que no son ningún invento de cierta prensa calificada como amarilla, y desde el reconocimiento de esta realidad, estar alertas y comportarse como lo han hecho este grupo de jóvenes y sus padres.