Este hecho recién trasciende, pero se llevó a cabo hace unos diez días en la sede del Cuerpo de Bomberos, donde el vecino José Bover entregó al jefe Lucas Laborde y a Graciela Delbaldo de la Comisión Directiva entre otro miembros de la institución presentes, dos trajes de neoprene de una pieza, con los accesorios correspondientes, como guantes, botas y capucha, para ser utilizados en rescates acuáticos.
Este vecino fue uno de los rescatados el 30 de diciembre de 2016 en la zona del puente de Hunter, cuando junto a otros compañeros tuvieron dificultades con sus kayak y durante el operativo de salvataje, los bomberos que intervinieron sufrieron el vuelco de su lancha, viviendo momentos de dramatismo, ya que uno de ellos permaneció desaparecido unos minutos, hasta que salió del río por sus propios medios.
Con este gesto se cierra un reconocimiento merecido a unos de los más destacados actos de servicio de los últimos tiempos que, puso en riesgo la integridad de sus miembros.