Un patrullero de la policía rojense permanecerá durante la madrugada vigilando el nivel de las aguas, que aparentemente se han estabilizado.
El agua se encuentra a metros nada más, de la llamada quinta de la familia Imaz. En la anterior crecida el agua avanzo sobre esta propiedad con un piso de 20 cm.
Creemos prudente realizar una observación, sin ningún ánimo de crítica, sino de colaboración, a los fines de optimizar los recursos humanos con que cuenta nuestra ciudad.
Nos parece que quien debería realizar la vigilia es el Estado municipal con algún móvil de Inspección General, y no la Policía que tendría que destinar ese patrullero a la prevención de hechos ilícitos en otros lugares de la ciudad.