Por Luis Miguel Caso
La salud preocupa y mucho. Pero también hay una situación social y económica que el Municipio debe atender.
Hay disminución de ingresos en la mayoría de los hogares, menos movimiento en los comercios. Para muchos, las dificultades para cubrir necesidades básicas, alimentos, remedios, luz, alquiler, son enormes.
El Estado nacional y provincial dan respuestas pero no alcanzan. El gobierno municipal a través de la Secretaría de Desarrollo Social también debería estar presente pero no lo hace.
La gestión de Claudio Rossi se desentiende de estos sectores como lo hizo desde que asumió hace cinco años ¡No es por falta de recursos! Con los salarios municipales por el suelo, la caja del gobierno engorda cada vez más porque los ingresos del municipio están creciendo fuertemente.
La coparticipación de impuestos aumentó un 100 por ciento en mayo (de 26 millones de pesos a 52 millones de pesos). La sensibilidad social de la gestión Rossi sigue siendo nula aún en pandemia ¡Lamentable!