Entre el escaso monto asignado por la Provincia en su Presupuesto 2018 y la desidia con la que los concejales locales han tratado la cuestión, no se vislumbra un rápido reinicio de las ansiadas obras.
Esto es así, atento a que con los 30 mil millones de pesos de Provincia para trabajos de tal magnitud, no será mucho lo que se podrá concretar, a no ser que la Nación se haga cargo del resto del financiamiento.
Y suponiendo que se alinearan los planetas y esté el dinero, habrá que tener en condiciones la documentación necesaria para poder comenzar.
Por lo cual, mientras el proyecto enviado por el intendente al HCD para rescindir los viejos contratos con las empresas que en su momento estaban ejecutando las obras, siga durmiendo junto a la inoperancia de estos ediles, tampoco será posible la reanudación de las tareas.
Polvo, mucho polvo, que, ojala algún día se esfume por completo junto a los vendehumos de la política.