Los vecinos que habitan las viviendas del Kamao, en las cercanías del Club de Pescadores, nuevamente son afectados por la crecida del agua.
Aun no se recuperaron del golpe anterior, incluso con amenazas de desalojo, y son castigados sin solución de continuidad.
Estas familias son las que más necesitan una ayuda rápida, efectiva y concreta, sin promesas para el futuro. Si el Municipio no puede reaccionar enseguida, seguramente la solidaridad de toda la ciudad servirá en un principio para aliviar la situación.
Estas fotos las subieron los propios damnificados a las redes sociales. Estaremos atentos a la evolución de la situación.
