Así quedó evidenciado en forma explícita al presentar este lunes 31 de julio el Menú Único Distrital que debe someterse a la cifra de 16,40 pesos por alumno y por día.
De acuerdo a los testimonios de los presentes por más esfuerzo y empeño que puso la nutricionista Guadalupe Bastianello en intentar convencerlos que con esa suma se puede alimentar adecuadamente a un niño en edad de pleno crecimiento, no resultó posible.
Y estos fue así mayoritariamente, ya que se da a entender que las raciones serán mínimas y sin posibilidades de repetir, y asimismo, y no menos importante, no se contemplan las distintas edades que generan necesidades distintas de alimentación; y este menú es uniforme para todos: desde los 3 hasta los 18 años.
Tampoco se tienen en cuenta las distintas fechas especiales para los alumnos, como el día del niño y el de la primavera, donde esperan algo distinto para disfrutar esos momentos.
La inflexibilidad del Gobierno con la defensa de esa cifra absolutamente insuficiente para garantizar una alimentación que brinde todos los nutrientes que un niño necesita para desarrollar adecuadamente su intelecto y su físico, lleva inevitablemente a que muchas autoridades de establecimientos educativos gasten algunos pesos más de lo asignado por el Ministerio de Desarrollo Social todos los meses.
Y en este contexto estas autoridades advirtieron que ya no se reconocerán más esos excesos en la ejecución de sus presupuestos. Lo que coloca a muchos docentes en una situación muy difícil desde el punto humanitario, por el compromiso que tiene cada uno de ellos con el futuro de sus alumnos, poniendo muchas veces dinero de sus flacos bolsillos para satisfacer debidamente su alimentación.
Para ir cerrando, resulta absolutamente insostenible que una profesional en nutrición pueda asegurar que con $ 16,40 por día se puede preparar un almuerzo a un niño en edad escolar. Si así fuera todos los hogares de la Argentina le estaríamos solicitando la fórmula para lograrlo, ya que la realidad cuando vamos a realizar las compras nos indica otra cosa.
Habrá otra reunión para que las autoridades de las escuelas puedan presentar alguna otra propuesta, pero con este insensible e inflexible presupuesto, solo queda rezarle a Dios para que los niños puedan crecer y educarse gozando de todos sus derechos.