La obra de ampliación del sistema de gas en Carabelas está prácticamente paralizada y no se entiende el por qué, ya que el Concejo Deliberante aprobó otorgar los trabajos a la única firma que se presentó en la licitación. La obra no avanza, el frío sí y la gente no cuenta con el vital servicio en medio de un crudo invierno.

Hace unas semanas atrás, el bloque de concejales radicales acusó al bloque opositor de Encuentro por Rojas de no dar quórum en una sesión para trabar el proyecto y dijo directamente que “Carabelas tiene que pasar frío por la irresponsabilidad de la oposición”. Nada de eso ocurrió, porque el permiso fue otorgado, pero los trabajos no se están realizando.

Acá cabe preguntarse si la inoperancia proviene del Municipio o faltó algún detalle legal para iniciar las actividades, cosa esta última que no importaría demasiado porque lo legal para el gobierno del intendente Claudio Rossi no existe. Si no cómo se explica que la docente jubilada Ana Lía Révora sea asesora del Municipio en Cultura y Educación y haya firmado un contrato con Rossi por 45 mil pesos. Los cambios en esas áreas no están a la vista.

Pero una buena parte de la localidad de Carabelas sigue sin poder contar con el servicio de gas domiciliario, aunque no se sabe debido a qué y la gente empieza a impacientarse. Agosto está prácticamente asomando y el frío no cesa. Tal vez la secretaria de Promoción Social les tenga preparada una partida de garrafas sociales para el mes que viene.