Este insólito hecho sucedió alrededor de las 11.15 horas de este sábado 10 de febrero en calle Aspirante Gazo entre Mitre y Juan G. Muñoz.

De acuerdo a los testimonios que dieron algunos vecinos de la cuadra, el episodio comenzó cuando un vehículo que había parado sobre Gazo, apenas pasando Mitre, se puso en marcha y su conductor sorpresivamente acelero y salió hacia adelante, embistiendo a los autos que tenía delante.

Primero chocó a un Peugeot 106 color gris al que lo hizo cruzar la calzada y luego embistió a un Chevrolet Corsa color blanco que a su vez golpeó contra una camioneta Volkswagen Saveiro, a la altura ya de la Panadería Rosafé, para que el lector tenga una idea de la cantidad de metros que recorrió este automovilista causando estos daños.

Luego del último impacto contra el Chevrolet Corsa, ante la mirada atónita de todos los presentes en la zona, siguió acelerando y se fue del lugar de los hechos.

Según dicen los que lograron observar la secuencia del evento, se trataría de una persona joven de sexo masculino, a bordo de un vehículo Volkswagen Gol color negro.

Hasta el momento se desconoce su paradero, pero se estima que por tratarse de un jovencito, quizás ante la magnitud del desastre que había protagonizado, buscó el amparo de su familia, para luego presentarse ante las autoridades como corresponde a asumir las responsabilidades de su accionar.

De no ser así, en la cuadra y en los alrededores existen cámaras de video, que se presupone habrán registrado el siniestro.

La cuestión es que el mal momento para los propietarios de los vehículos dañados, resultó totalmente sorpresivo, y viendo la cantidad de metros que este joven recorrió con su auto, llegando más allá de la mitad de cuadra, podemos decir que teniendo en cuenta el horario y el movimiento que se genera en la panadería Rosafé, el resultado de este descontrol podría haber sido mucho peor.

Afortunadamente no hubo que lamentar ninguna persona herida, resultando el automóvil más dañado el Chevrolet Corsa color blanco.

Transito ferozmente imprevisible.