Por estos días se culminó con el revoque exterior y actualmente se está realizando esa tarea en el interior.
Visto los ritmos que han ido teniendo las obras, es válida la inquietud que se plantean desde la comunidad educativa y los vecinos de la zona, que vendrían a ser las partes interesadas, en cuanto a su culminación para ser utilizado en el próximo ciclo lectivo del 2018.
Hubo algunos contratiempos con la provisión de materiales y los profesionales intervinientes se vieron obligados a ir cambiando los planes sobre la marcha.
Habrá que ir observando los avances en estos días que restan, ya que generalmente las instalaciones de las mamposterías, pisos, cielorrasos, conexiones eléctricas, de gas, sanitarias, y demás detalles suelen necesitar de un tiempo y una paciencia que son necesarios para no tener sorpresas desagradables posteriores.
Pero lo importante más allá de si se llega o no para su inauguración al ciclo 2018, es que la obra está y va a ser concluida.
Han transcurrido tantos años de postergación de ese sector de nuestra zona urbana que seguramente esta edificación potenciara su desarrollo.