El licenciado Ricardo Bini, quien conoce muy bien la problemática de los residuos sólidos urbanos en Rojas, sostiene que para lograr una correcta gestión de residuos es necesaria la implicación del Estado, y uno de los puntos importantes a implementar es un proyecto de concientización con la incorporación de promotores ambientales.
Bini remarca la importancia del diálogo con los vecinos, el “cara a cara”, ir “casa por casa, explicando paso por paso cómo separar y por qué”. Esta es la manera más efectiva, no la única, de crear conciencia y de llegar a toda la población.
Reconoce que concientizar es un camino largo y difícil. Por eso, debe ser una apuesta sostenida en el tiempo, no de uno o dos años, sino de décadas. El proyecto debe exceder las gestiones y sostenerse hasta que se haya completado de manera absoluta. Debemos convertir la gestión de residuos en una cuestión cultural.
La situación del basural a cielo abierto es un problema que trasciende la particularidad de esta ciudad. En Argentina, existen más de 5000 basurales a cielo abierto, donde el tratamiento de la basura y las medidas de seguridad son escasas o nulas. Estos basurales son graves contaminantes del suelo, el agua y el aire, lo que los convierte en un serio peligro para la sociedad, perjudicando a sus integrantes en distintos grados, siendo sus principales víctimas aquellas personas que están en contacto directo con la basura, que viven de ella, o que sus viviendas se encuentran cercanas a este tipo de depósitos.
Si bien existen planes que apuntan a cambiar el paradigma respecto al tratamiento de la basura, parece ser que la clase política y la ciudadanía en general no logran tomar esta grave situación con la seriedad que merece.
Para ello deben cumplir con el amparo ambiental. Debe proponerse como objetivo terminar con el humo del basural y comenzar con el camino para el traslado definitivo hacia un relleno sanitario. Pero para esto necesitamos responsabilidad ética y cívica de los funcionarios, y de la clase política en general.
El concejal insiste en el compromiso del Estado más allá de las gestiones: “se debe garantizar una continuidad de las acciones ambientales ante los cambios de gobiernos y autoridades, un trabajo transversal hacia el interior del municipio, generar indicadores de sustentabilidad, agilizar los vínculos con la población y las organizaciones y formalizar los procesos de participación”.