Esta semana llegó el cuarto y último cargador frontal que compró el Municipio de Rojas para la ciudad cabecera y las delegaciones de Carabelas y Rafael Obligado. Precisamente a esta última será destinada la nueva maquinaria que se suma al parque automotor municipal. Hace unos días atrás lo mismo había sucedido en Carabelas y en el corralón local. El delegado Ariel Gallardo se mostró muy conforme con la adquisición y adelantó que con la nueva pala los trabajos podrán realizarse con mayor eficiencia.

Este cargador frontal llega con una novedad; y es que, por pedido del Municipio, la empresa que los realiza le agregó un dispositivo que estaba previsto para que posibilite, a través de una tercer vía de accionamiento, un cilindro adicional hidráulico que acciona la nueva parte de máquina que es la “garra”.

Dicho dispositivo sirve para prensar montículos livianos como por ejemplo ramas y elementos que para poder cargarlos sobre el balde habría que toparlos contra otro elemento, lo cual trae aparejado múltiples problemas que se ocasionan en la vía pública, tales como cordones rotos, generación de cavas y pérdida de verticalidad de columnas.

Si bien la cotización de este tipo de maquinaria es en dólares, la inversión que debió realizar el Municipio para obtener los cuatro equipos rondó los 2 millones de pesos. Los cargadores son medianos y se apunta, tal como se mencionara, a mejorar los servicios con equipos que tengan  determinadas características favorables para los trabajos que se ejecutan en esta zona.

Desde diciembre uno de los problemas que más preocupó a la gestión Rossi fue el lamentable estado del parque automotor con el que contaba el Municipio. La desidia y la falta de inversión de la última administración, hicieron muy cuesta arriba el trabajo cotidiano. Es por eso que, además de todas las obras anunciadas, lo que se busca es invertir fuertemente para mejorar las condiciones de trabajo y brindar un mejor servicio.

¿Cómo? Adquiriendo máquinas y vehículos de última generación. En ese lineamiento se trabaja y, en poco tiempo, llegarán nuevas unidades. Del mismo modo, a la brevedad se realizará un remate de rezagos para desprenderse de la obsoleta maquinaria que solo genera gastos de reparación o que directamente no funcionan.