Llega la época estival y el indetenible caudal de vehículos que transitan por las rutas de la Argentina, y mayoritariamente por las bonaerenses, lamentablemente generan cientos de accidentes de tránsito.

Según la Asociación Civil Luchemos por la Vida, dedicada a realizar campañas de concientización sobre la seguridad vial, “en los últimos años el 6 % de los afectados por dichos accidentes son niños o niñas menores de 10 años, lo que representaría alrededor de 400 niños o niñas, dato alarmante ya que por su condición física son mucho más vulnerables que las personas mayores”.

En este contexto preocupante, el diputado provincial del GEN, Jorge Santiago, presentó esta semana en la Cámara baja provincial un proyecto de Ley que prevé incorporar el artículo 48 bis a la Ley N° 13927, el que quedara redactado de la siguiente manera:

“Los niños o niñas menores de 10 años, deberán ser transportados en el asiento de atrás del vehículo, con el correspondiente sistema o dispositivo de retención infantil, adecuado a su peso y altura, debidamente homologado por la Autoridad de Aplicación.

En el caso de los vehículos afectados al transporte público, como taxis y colectivos, deberán garantizar que al menos el 30 % de sus unidades de transporte cuenten con sistemas o dispositivos de retención infantil debidamente homologados por la Autoridad de Aplicación.

Su incumplimiento será considerado como una falta grave”.

Santiago fundamenta su iniciativa manifestando que “de acuerdo a estudios, en choques de a tan solo 50 kilómetros por hora es imposible que el adulto pueda retener a un niño que lleva en brazos, y ante un choque de esta magnitud el pequeño sale despedido con la misma fuerza que la de una caída desde un tercer piso”.

Y prosigue advirtiendo que “los cuerpos de los ocupantes del vehículo siguen moviéndose hacia adelante a la velocidad que el auto traía hasta ese momento, impulsados por una fuerza que equivale a 40 veces el peso de cada persona”.

Apoyándose también en estudios realizados por la Asociación Civil Luchemos Por La Vida, la iniciativa replica: “Los niños o niñas menores de 10 años son los más afectados, porque incluso hasta en el caso de una frenada brusca, sin llegar a considerarse accidente de tránsito, podría desplazarlos hacia adelante y sufrir traumatismos, leves o graves”.

Para evitar que estos inconvenientes de salud sucedan entre los menores de edad, el diputado rojense opina que “es fundamental la utilización de cinturones de seguridad y otros elementos de contención en forma correcta, que mantienen a los pasajeros niños y adultos, sujetos al asiento del vehículo y que disminuyen la mortalidad y las lesiones graves en caso de accidente”.