Estos servidores públicos, preocupados siempre por el bienestar y la seguridad de la población, advirtieron la rotura de los rieles de las vías que se encuentran próximas a la entrada de Carabelas.
E inmediatamente comenzaron a utilizar todos los medios de comunicación posibles para que los automovilistas tuvieran la máxima precaución al circular por el lugar.
Más allá de esta loable actitud, es de suponer que ya están actuando las autoridades correspondientes, para prevenir accidentes, mientras se gestiona la reparación definitiva de la calzada.
Demos gracias a los Bomberos Voluntarios carabelenses.