La penosa circunstancia sucedió alrededor de las 20.30 horas de este domingo 1 de marzo.
A la honda pena del fallecimiento, los familiares de la mujer debieron aguardar que se cumplan los procedimientos de rigor con la intervención de la división de la Policía Científica que certificó su muerte por causas naturales.
Esta situación fue confirmada por autoridades policiales ante la consulta por el notorio movimiento que se generó en el lugar con la presencia de una ambulancia del SAME local y de un móvil de la Policía Comunal, lo que llamó la atención de numerosos vecinos por tratarse de una zona con bastante circulación por la presencia de un concurrido supermercado.
La señora fallecida es miembro de una familia conocida y apreciada en la comunidad cuyos hijos son comerciantes y repetimos, a la pena del deceso de su madre, se le agrega la inevitable y lamentable circunstancia de tener que pasar por estos trámites, antes de su descanso eterno.
Brindamos la información por lo público y notorio del hecho para despejar especulaciones que sólo ahondarían el dolor de los deudos.