Hace un mes que el rojense Claudio Villarruel tiene interrumpido su tratamiento oncológico debido a la burocracia que impera en los organismos gubernamentales como el IOMA. Ya había denunciado públicamente hace un tiempo sobre el recurso de amparo al que debió recurrir para que se le suministraran las drogas prescriptas por su médico especialista.

Hace unas semanas, nos había dicho: “Lamentablemente tuve que cortar el tratamiento porque hace 16 días que no tengo la pastilla, tengo dolores otra vez y es como que tengo que arrancar de cero, es lamentable porque con esa medicación me sentía muy bien, habíamos dado en la tecla, volví a comer, a caminar mejor, acepté bien la droga y ahora me encuentro con esto, sin novedades de que vaya a llegar la medicación”.

Y agregó: “A eso hay que sumarle que estoy tomando otras pastillas que antes costaban quince mil pesos y ahora están a setenta y dos mil pesos, no se puede así, no hay formas de comprarlas”.

Villarruel opina que “entre el IOMA y el Gobierno nacional han hecho un desastre porque cortaron los tratamientos oncológicos y hoy se piensa más en el dólar que en la gente oncológica, en una Argentina tan rica, es algo injusto, inaudito, esto debería ser una prioridad”.