Se trata de las conexiones que permitirán llevar los líquidos a las salidas que van hacia la Planta Depuradora.

Esta obra comenzó el pasado 6 de febrero buscando optimizar el funcionamiento de las nuevas bombas que por resultar más potentes que las anteriores cuando arrancan a pleno impulsan más caudal del que las cámaras del lugar pueden absorber, provocando los desbordes que afectan a los vecinos del lugar.

Con esta cámara intermedia o suplementaria se solucionaría esta dificultad. Estas instalaciones tienen una capacidad de retención de doce mil litros que mantendrán los líquidos durante el tiempo necesario para que vayan escurriendo hacia la salida directa a las cañerías que van a la Planta Depuradora.