El secretario de Seguridad del Municipio, el inefable abogado penalista Miguel Núñez, decidió denunciarnos para acallar las críticas que este portal le hace a su gestión por ineficaz e ineficiente. Con todos los recursos que le dejó la administración anterior, Núñez no pudo ni supo controlar el delito que emerge y amenaza con llevárselo puesto.

El centro de Monitoreo, modelo en la región y copiado por otros municipios, solo funciona a la mitad de su capacidad porque las cámaras de vigilancia no están todas cumpliendo su cometido. Las tres camadas de policías, formados en la Escuela Vucetich cuya sede descentralizada está en Rafael Obligado, no trabajan a la altura de las circunstancias por la ineptitud de Núñez.

Los móviles policiales recuperados de su abandono y los 8 nuevos patrulleros que llegaron luego de gestiones ante la Provincia y la concreción de la Comisaría de la Mujer y la Familia son herramientas que Núñez no puede articular por incapaz, por desconocer la temática y por querer sostenerse en un cargo que le queda enorme.

Hasta ahora, el inefable abogado penalista viene manejando números que no cierran y se escapan. Los índices delictivos son elevados y la ciudad no cambió tanto para que ello ocurra. Entonces por qué Núñez no puede articular una, aunque sea una sola política de seguridad seria con tantas herramientas. Parafraseando a un asesor presidencial de Bill Clinton, podemos concluir que “Es la capacidad, estúpido”.