Matías Preciado, el detenido que denuncia que le armaron una causa de venta de drogas en la localidad bonaerense de Rojas, espera el inicio del juicio oral de manera angustiante: reclama justicia con una huelga de hambre y pide medidas para mostrar su inocencia.
El detenido pidió mediante un escrito al Tribunal Oral Criminal 1 de Junín que se cite a los abonados de servicio de los dos celulares, que indicaron se radicaron las denuncias anónimas que provocaron el inicio de la investigación que lo llevó a la cárcel. “Llamaron desde teléfonos con chips adulterados con abonados que tienen dni de otras personas”, explicó un allegado a Preciado.
Tras el pedido desde la Fiscalía general de Junín se logró saber desde qué números telefónicos llamaron a la Policía Federal de Pergamino y a la Dirección de Drogas Ilícitas de Junín, y desde la defensa de Preciado quieren saber la identidad de los llamantes bajo la convicción que todo fue armado.
“Los llamados anónimos fueron el primer paso para que Preciado sea sometido a una investigación, a allanamientos irregulares en la que plantaron drogas y falsificaron declaraciones de testigos”, aseguraron desde el entorno del detenido.
Preciado aseguró que anunció, un año antes, que le iban a iniciar una causa falsa luego de denunciar a fiscales, jefes policiales de la Federal y a un dealer que opera en Rojas, conocido con el alias de “El Cordobés”.
A pesar de esta crónica anunciada, Preciado fue detenido luego de un sospechoso allanamiento en la casa de su padre en el que incautaron leche en polvo y dijeron que era cocaína y lleva casi un año preso. Para reclamar justicia inició huelgas de hambre y hasta se selló la boca con pegamento.
Además, allegados de él se tomaron el trabajo de filmar cómo opera la banda de “El cordobés” en Rojas, donde hay escuchas telefónicas en el que el dealer explica que hace meter presos a “perejiles”.
La justicia de Junín le puso fecha al juicio oral a la causa que tiene como imputado a Preciado
El Tribunal Oral Criminal 1 de Junín iniciará el juicio el próximo 15 de diciembre y tendrá en el banquillo de los acusados a Matías Preciado, de 39 años, quien se encuentra con prisión preventiva y desde la cárcel reclama que es inocente y que le armaron la causa.
Según Preciado, “El cordobés” cuenta con zonas liberadas porque le paga un canon a jefes policiales y fiscales, y el narco manda a meter presos a “perejiles”.
Con problemas de salud en su sistema digestivo, Preciado no quiere que lo operen ya que sospecha que pueden pasarlo de anestesia a propósito para que muera y no se sepa la verdad de su causa.