En la madrugada de este sábado 17 de agosto no sólo hubo que lamentar un grave accidente de motos en la Ruta 45 con el saldo de dos jóvenes luchando por su vida, sino que en otro hecho preocupante, un grupo de personas (se presumen adolescentes) golpearon de forma violenta la puerta de la llave de gas del Instituto San José que da sobre calle Dorrego, causando la rotura de uno de los caños, provocando una inmediata fuga de gas.
El golpe y el posterior escape de gas fue tan fuerte que un vecino advirtió la situación dando aviso a los Bomberos.
El hecho sucedió alrededor de las 4 horas, destacando los vecinos el rápido y diligente accionar de las fuerzas policiales en un principio, quienes acertadamente procedieron a cortar el tránsito en todas las calles adyacentes, hecho este resaltado por el bombero interviniente, Juan Pablo Rivolta.
Rivolta nos manifestó que una vez en el lugar, cerró la llave de paso, dado que la reparación de las cañerías la debía realizar personal calificado en la materia (de hecho lo estaban haciendo cuando concurrimos a tomar una foto) y que la medida de los policías al disponer el cierre de calles fue fundamental para evitar una posible explosión.
Más allá de la información y la noticia en si misma sobre un hecho puntual de vandalismo, cabe llamar a la reflexión a la comunidad toda, con las autoridades a la cabeza para desplegar acciones que reviertan esta actualidad, donde la vida de todos (incluidos las autores de los hechos) está en peligro.
Sera el tiempo de dejar de hablar tanto con planes que nunca se puede saber si se ejecutan y que resultados tienen, para pasar a medidas concretas que la legislación vigente permite, es decir que las herramientas legales existen y no vamos aquí a dar una catedra sobre ellas, pero si se supone que las autoridades las conocen; resultando entonces una cuestión de decisión política hacer lo que la ley dice.