Prácticamente nadie resiste un archivo y mucho menos si se trata del intendente Claudio Rossi, que no tiene coherencia en lo absoluto. Siempre va para donde sopla el viento y con un detalle que no es menor.
Basó sus dos anteriores campañas en señalar que el gobierno de Martín Caso abusaba del color naranja y que todo lo pintaba naranja. Rossi decía que él no iba a hacer una cosa así si le tocaba comandar los destinos de Rojas.
Bueno pasa todo lo contrario desde que es jefe comunal. Está pintando todo de azul, hasta las columnas de luz que históricamente son de color naranja. Parece que quiere borrar el pasado, pero sin hacer nada más que pintar, porque obra pública nada, anuncios muchos.
Hasta mandó a hacer las columnas y los carteles identificatorios para las calles, de color azul. Eso sí, costaron más de un millón y se hizo sin licitación. Impresentable.
Rossi sigue pintando todo de azul para imponer su impronta, pero no se sabe para qué. El tránsito no lo puede acomodar, la seguridad es un desastre con su secretario a la cabeza, la sede de la UNNOBA sigue sin inaugurarse y la pavimentación de las tres cuadras del barrio Santa Rita sigue sin terminarse. Igual Rossi sigue pintando todo de azul.