Estas situaciones se visibilizan como consecuencia de la profundización de los operativos de control de tránsito dispuestos por las autoridades municipales con el apoyo logístico de la Policía Comunal.

Más allá de la estricta formalidad de la legislación aplicable a las faltas de transito que a diario se constatan, habría que tener presentes dos palabras que a menudo los seres humanos dejamos a un costado; “sentido común”.

Esto cabe tanto para los funcionarios que están a cargo de los operativos, como para los conductores no solo de motos, sino de cualquier tipo de vehículos.

Para quienes están a cargo de los operativos quizás cabria reconsiderar algunas cuestiones como horarios, lugares, tipo de infractores a sancionar; todas cuestiones que parecerían razonables, más allá de la obvia autoridad con que cuentan para disponer lo que crean más conveniente desde la responsabilidad del cargo que ocupan.

Y para los conductores, deben saber que existen derechos y obligaciones y entre estas últimas se encuentran las normas sobre la documentación con que deben contar para manejar un vehículo.

Sentido común.