El papel que ha jugado la oposición ha sido muy pobre durante este año ante una gestión que presenta muchas irregularidades, con funcionarios caros y un despilfarro de dinero inaudito como nunca se ha visto.
Los servicios son deficientes, con contrataciones de docentes jubilados a través de asesoramientos pagos, falta de insumos en el Hospital, poca contención a familias necesitadas y los índices delictivos muy elevados, algo a lo que no estábamos acostumbrados.
A pesar de todo eso y muchas falencias más, el intendente Claudio Rossi armó una fiesta, mientras los concejales de la oposición duermen la siesta. Dieron pocas conferencias de prensa, investigaron casi nada, no caminaron las calles y el descontento de la gente crece día a día.
No hubo guardias en la Terapia Intensiva del Unzué y sin embargo el caso pasó desapercibido. No hubo un plan de seguridad durante 11 meses y nada expusieron los ediles al respecto. Todos los funcionarios se fueron de vacaciones antes del primer año de gestión, pero eso tampoco pareció importar.
Los concejales vecinalistas presentaron pocos pedidos de informes y dieron quórum todo el año por temor a ser llevados por la fuerza pública. La gente prácticamente no los conoce porque no tienen contacto con la calle. Son funcionales al gobierno actual. Y la ciudadanía ha elegido a este portal como un polo opositor, donde se revelan las desprolijidades de una administración que no administra como corresponde.