Este sábado 14 de abril por la tarde, un patrullero de la Policía Local de nuestra ciudad, recorrió la ribera del río, informando a quienes estaban pasando una agradable jornada de esparcimiento que no podían hacerlo, si no cumplían con las disposiciones de una ordenanza.
A la mayoría de los vecinos que sufrieron esta inesperada noticia, no les quedaron claros los motivos de este accionar de los agentes policiales.
Muchos de los pescadores, conocen una norma provincial que reglamenta un permiso, que varios de ellos ya han sacado, pero en esta oportunidad según manifiestan, los argumentos para que se retiraran fueron sobre una ordenanza local.
Por lo cual es necesaria una rápida aclaración por parte de las autoridades municipales, para no quitar un nuevo derecho a la comunidad, en esta actualidad de ajustes sin fin, que bueno sería que impida también actividades gratuitas y de esparcimiento.
Seguramente se levantarán algunas voces que, con razón, hagan referencia a quienes depredan nuestro rio, pero esa es precisamente la tarea que la Policía, debiera llevar adelante con más intensidad y no frustrarle la jornada a muchas familias que solo van a pasar buenos momentos.
Si no, seguiremos haciendo pagar a justos por pecadores.