Hubo un cálido y emotivo acto oficial por el Día de la Bandera y se llevó a cabo este miércoles en horas de la tarde en las instalaciones de la Escuela Primaria N° 7 y de la Escuela secundaria N° 1 de Rafael Obligado. Los y las estudiantes de 4° año de la Escuela Primaria N° 7 y N°1 6 realizaron la promesa de lealtad a la Bandera a cargo de la inspectora de Nivel Primario Bettina Mangone.
La organización de la ceremonia fue realizada por los equipos institucionales de la Escuela de Educación Secundaria N° 1, de la Escuela Primaria N° 7 y del Jardín de Infantes N° 902 de Rafael Obligado presidido por la inspectora jefa distrital María Daniela Acuña.
Estuvieron presentes el intendente municipal, Román Bouvier; la presidenta del Consejo Escolar, Marianela Barzaghi; la secretaria de la Secretaría de Asuntos Docentes, Lorena Savi; consejeros escolares, concejales, CIIE Rojas, inspectores de Enseñanza y el cuerpo de Bomberos Voluntarios de la localidad. Una masiva concurrencia de familias disfrutó de las intervenciones artísticas protagonizadas por estudiantes y profesores.
“El 20 de junio nos ofrece cada año una nueva oportunidad para recordar con admiración a uno de los hombres más significativos del movimiento emancipador, y rendir homenaje a la memoria de un grande de nuestra Patria: Manuel Belgrano y con él, enaltecer el mayor legado de amor que sólo un verdadero patriota pudo haber hecho a su nación que recién nacía: nuestra Bandera”, expresó Acuña.
En igual tono, recalcó que “fue un hombre que dio su vida por los valores que consideró loables: libertad, justicia, paz, tolerancia, educación y que dejó testimonio de honor, amor a la patria, coraje, intelectualidad, sabiduría, valentía y humildad. Valores que hoy siguen siendo fundamentales para que la Argentina pueda ser el país por el que Belgrano luchó y soñó para todos nosotros”.
“También es una oportunidad para pensar en las mujeres que fueron partícipes claves pero invisibilizadas en el relato histórico. El rol de la mujer en la construcción de la historia nacional y su reivindicación en estos últimos años nos permite cuestionar el rol pasivo tradicionalmente asignado. Desde esta perspectiva María Catalina Echevarría puede dejar de ser «una mujer cosiendo», para poder pensarla plenamente consciente y articuladora de las propias discusiones revolucionarias de las que formó parte”, prosiguió.
“Pensar en la bandera como un símbolo de lo que somos, del pasado y presente; en la que están inscriptas las luchas por la independencia, la libertad y la defensa de nuestra soberanía; los nombres de todos aquellos héroes y heroínas anónimas que murieron por ella”, anexó.
“A 40 años de la democracia, es una oportunidad para recordar que hubo tiempos en que los símbolos nacionales estaban prohibidos para los civiles, estaban sólo reservados al Estado y los militares. Durante décadas en la Argentina se utilizaron dos banderas simultáneamente. La bandera que hoy nos permite, ni más ni menos, reconocernos como parte de un proyecto colectivo, esa bandera flameando es un logro de la democracia”, acotó.
Finalmente, reflexionó: “los y las invito a que adoptemos y hagamos propios los valores de la democracia, la libertad y la soberanía. Hagamos que la memoria de Manuel Belgrano cobre una actualidad palpable y comencemos a construir la Patria grande, soñada por él. Una Patria donde se amplíen derechos y se brinden oportunidades. Una Patria en la cual la escuela educa para la democracia y porque la educación pública es nuestra bandera”.