Este miércoles 7 de agosto en la sede de UATRE, las 150 mujeres que el gremio ha logrado incluir hace tres años en las labores del deschalado de la firma Bayer, finalizando la actual campaña recibieron primeramente, una información de parte del titular de la delegación local, Luis Biorlegui sobre la aplicación del aumento que completo el índice de inflación del 2018 que había sido gestionado por el mismo Biorlegui.

Una vez que finalizó esta explicación, como así también una breve pero necesaria aclaración sobre el periodo de vigencia de la cobertura de la obra social, todas las operarias participaron de una charla que brindo el delegado provincial del RENATRE, Juan Rodrigo Sponda, sobre distintos aspectos de interés para estas trabajadoras como la comprensión del recibo de sueldo, a las funciones del RENATRE, cuestiones de seguridad e higiene, entre las más consultadas, además de ir anticipando capacitaciones sobre técnicas de RCP y primeros auxilios que se dictara el próximo 30 de agosto.

Recordemos que a instancias de una gestión de Biorlegui desde el 2016 año a año estas mujeres han ido paulatinamente ocupando lugares  de trabajo que eran ejecutadas por operarios que llegaban de otros lugares del país, pasando de ser 25 en un comienzo a 150 en la actualidad, aguardando con expectativa la concreción de proyectos de expansión que está ejecutando la empresa para los próximos años, con la apertura de nuevas áreas que sumaran más servicios a los que ya se brindan.

Biorlegui junto a las trabajadoras que se desempeñaron como jefas de cuadrilla, resaltaron varios aspectos positivos de esta relación laboral, donde si bien los contratos son por cuatro meses, se les garantiza la cobertura de la obra social durante todo el año.

En esta campaña el salario promedio de bolsillo ha llegado a un mínimo de 40 mil pesos, resaltando desde el gremio que es dinero que circula en la economía local.

Haciendo un poco de historia, el dirigente sindical cuenta que llegar a este presente no fue sencillo, fueron años de intensas y a la vez pacientes gestiones con su equipo de trabajo, motivados por el deseo que percibían de este grupo de mujeres de tener una chance y no desaprovecharla.

En ese sentido, ellas mismas han ido efectuando un sincero análisis de su desempeño, ajustando conductas individuales que podían perjudicar al conjunto, para lograr una cohesión que garantice un buen resultado de las tareas que llevan a cabo.