La violencia comunicacional, verbal y hasta prohibir la libertad de trabajo de un periodista genera repudió y retoma las viejas épocas en dónde unas pocas personas podían hablar y a otros se les cortaba el derecho de la misma.

En este caso, el periodista de Rojas, Eduardo Alberti, sufrió la consecuencia de dos “patotas” de Patricia Bullrich que, en su recorrido de campaña, contestaba preguntas del colega sobre Argentina, lo que fue su participación en el 2001 y el caso Milman.

En este tema, rápidamente mientras Patricia Bullrich aceleraba el paso, fue interceptado por dos “patotas”, quienes lo obligaron a cortar la entrevista y dejar de grabar.

“Fue un duro momento y difícil por las preguntas que le realizaba el colega ante la mirada de la comitiva que la acompañaban y una persona foránea a la localidad de Rojas se interpuso entre la funcionaria y el periodista local”, señalaron diversos medios.

Por otra parte, el presidente del Partido Justicialista local, Ramiro Baguear, repudió la intimidación y la interposición de la comitiva de Patricia Bullrich cuando el periodista Eduardo Alberti le estaba realizando unas preguntas en la Plaza San Martín.

“Quiero expresar el total repudio por el acto de intimidación y coerción recibido por el periodista local Eduardo Alberti por parte de la presidenta del Pro Patricia Bullrich, en su visita a Rojas”, dice el comunicado.

“Cuando no hay blindaje mediático y las preguntas molestan lo único que les queda es la violencia”, reza el mensaje que envió Baguear sobre el hecho ocurrido en horas del mediodía de este lunes.