La desoladora noticia que se conoció a media mañana de este viernes 6 de diciembre excedió prontamente el ámbito de la salud donde Jorge Gil se desempeñaba, para cubrir todos los rincones de la ciudad.

Los pasillos del Hospital Unzué y la Clínica, dicen sus compañeros, ya sienten un vacío que llega al alma de cada uno de ellos.

Jorge Gil fue un enfermero que además de poseer una reconocida profesionalidad, supo transmitir su calidez y humanidad a cada paciente que paso por los centros de salud que mencionamos arriba.

Además de la pasión por su profesión de enfermero, en sus ratos libres les dedicaba mucho tiempo y mucho amor a sus perros galgos.

Desde hace un tiempo su salud lo estaba traicionando y finalmente este viernes dejó de sufrir, dejando una imagen y un legado en el ejercicio de la enfermería que sus compañeros irán transmitiendo a las sucesivas generaciones.

Está siendo velado en calle General Alvear 589 (Casa Solari) y el sepelio será este sábado 7 de diciembre a las 10 horas en el Cementerio Municipal.

Falleció Jorge Omar Gil, una buena persona que además era enfermero.