La crisis económica que programó el gobierno de Mauricio Macri y sus CEOs sigue rindiendo los frutos esperados, por ellos obviamente, y ese rigor se hace notar en todas las escalas de las PyMEs. En Rojas bajó sus persianas la carnicería “Kiara”, la cual pertenece a un grupo que no es de Rojas, pero que había apostado por nuestra ciudad.

Con esta boca de expendio de carne que cesa en su actividad comercial, Rojas tiene cinco desocupados más. Son cinco familias que pierden el sustento diario y que deberán buscar otras opciones para remediar su situación.

Ya pasó algo similar con los empleados del Peladero, 82 familias en situación de calle, aunque algunas de ellas ya lograron superar el trance. Casi todas las cuadras tienen un local vacío, ya sea porque cerró el negocio que allí se desempeñaba o porque sus propietarios no pueden alquilarlos.

Ya no llama la atención el silencio de las autoridades municipales, ya que no irán a pronunciarse contra Macri ni la gobernadora Vidal por temor a represalias. Aunque ya se sabe que los fondos prometidos al intendente Claudio Rossi no llegarán a las arcas municipales.