Esta semana bajó sus persianas una confitería que desarrollaba su actividad en el local donde funcionara durante décadas la tradicional heladería Bahillo, en la Avenida 25 de Mayo.
Con este ya son tres los negocios del mismo ramo que han cerrado desde el inicio de la actual gestión de gobierno nacional.
Algunos comerciantes del sector aseguran que están en una actualidad económica muy complicada, con una marcada caída en el consumo y costos de tarifas de servicios, insumos e impuestos que han aumentado a niveles insoportables para el nivel de facturación que están teniendo, que los va llevando a una situación de perdida que no podrán sostener por mucho tiempo.